jueves, 23 de julio de 2009

Jabón Blanco.

Qué me importa si te bañás o no? si me estás esperando ahora en tu casa para que hagamos el amor por primera vez, por última o no hagamos nada y hablemos del Indio Solari. En un par de horas por ahí te digo que te amo, y a vos te suena raro, entonces decís que el amor es mala palabra. En un par de horas por ahí toco el timbre de tu casa, sale tu vieja y me manda a la mierda porque me parezco a tu novio anterior, ese que te puteaba adelante de ella, para hacerse el macho, porque sabía que tu vieja estaba sola, y cualquier destello de hombría la seduciría. Pobre estúpido. Qué importa si me decís ahora en un par de minutos cuando te llame por teléfono que al final tenés sueño, y entonces yo me tiro adentro del vaso de grappa y me vuelvo una sirena del riachuelo? En qué momento empezamos a ser tan paranoicos o dejamos de ser inocentes? Porque no me nieguen que la paranoia no es sólo una marca más de la culpa. Cuándo fue que nos olvidamos que lo único que necesitamos es calor, cucharita, alguien que nos escuche, nos admire y tenga ganas de vernos de nuevo, después de que le mostremos las cicatrices horribles de nuestra piel?Hacemos cuentas, el alquiler, los puchos cada vez más caros, la facu privada, el postgrado a precio dólar, que se nos gasta el perfume importado y tendremos que volver a la colonia Paco, o lo que es mucho peor, a fumarlo en plaza Almagro. La calculadora está por explotar, la banda ancha, las llamadas a celulares, el impuesto para pagar los viajes del hijo de Macri, y volvemos a olvidar lo que sabíamos de niños. O algún distraído sigue pensando que de niños no nos preocupábamos porque éramos pelotudos?Te decía, se hace tarde para irte a buscar, y vos esperando, esperando empezás a hacer conjeturas sobre mi demora, y la espera desespera dice un poeta de la cumbia villera. Señora, llame a la policía, mis amigos y yo los vamos a coger a todos. El problema va a ser cuando nos empecemos a coger entre nosotros, ahí ni la guardia urbana te va a salvar. Si alguno tuviera la receta para curar la infelicidad en todos nosotros, no piensan que ya la hubiera publicado en deremate.com? O será que la única respuesta es esa que veo todos los días en el portero, el dentista o mi madre? Dejar que la vida pase, y que siempre sea “mientras tanto”. Por eso, no te bañes, que antes de irte a buscar compro una bolsa de mierda en mc donalds y la llevo calentita para demostrarte mi amor. Cómo puede ser que haya tanto cínico suelto diciendo que lo malo está por irse, boludos maniqueístas que definen a las cosas por su valor energético. Chau, tengo demasiadas preguntas, y no me anda el signo de admiración en el teclado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario