sábado, 25 de julio de 2009

El Bienestar en la Cultura. Un café fuerte que vomité, pero sin filtro.

Ser o querer ser.



(nota publicada en la revista El Mestizo, julio de 2006)

Mientras se juega el Mundial, el mundo sigue girando, no parece, pero la vida continúa. En las siguientes líneas haremos un repaso de lo otro que aconteció en este silencioso mes. Esperamos que el lector no se sienta tocado, cualquier cosa levante la mano para hablar, es el mejor signo para establecer una asamblea. Ah, tiene razón, es una lástima que los medios transformen comunicación en difusión, y que la única mano que se levanta en este mes es la mano de Dios, ¿se sintió tocado?, no podemos jugar a la mancha, mejor siga mirando el Mundial…
Los medios registraron seis violaciones en menos de 15 días, puede que sea uno de esos cínicos golpes mediáticos (recordar la época en que secuestraban un empresario por día), pero en comparación con el mes pasado parece que los deseos sexuales reprimidos que el fútbol sublima en forma de orgasmos-goles, se canalizaron en violencia contra la integridad sexual. Dos de estas violaciones acontecieron minutos después de la finalización del partido que Argentina le ganó a Serbia y Montenegro por 6 a 0. Seis goles, seis violaciones, la tragedia de la numerología.
Antes viajábamos a la estratosfera y llegábamos a cualquier punto del planeta en 45 minutos, ahora Kirchner, un poco más austero que su predecesor innombrable, declaró que en menos de dos años va a estar listo el tren bala que tardará dos horas y media en un recorrido entre Capital y Mar del Plata. Un chapuzón en la Bristol y de vuelta al micro centro a broncearnos color cemento. ¡Cortinas de humo, dos por diez pesos!
Decía Levi-Strauss que la prohibición del incesto es la ley universal que determina el paso de la naturaleza a la cultura, el único nexo inevitable con el que el hombre se hace un animal cultural. Parece que estos hermanos no leyeron nunca al francés, y mientras Saviola se encontraba con Maxi Rodríguez para hacer el primer gol frente a Serbia, estos dos chicos se reencontraban, y huían de la casa de sus padres. Son hermanos biológicos, ella tiene 13 años y él 16, la madre al encontrarlos (en contadas veces) a los besos, amenazó con separarlos, al día siguiente ya no estaban, desaparecieron y hasta el momento se desconoce su paradero. Si leen esto, felicidades, como toda excepción a la regla los necesitamos para reconocernos como seres falibles, con cada norma moral represiva que se rompe, nos acercamos un poco más al bienestar en la cultura.
En la Argentina hay quienes se quejan de la mala distribución de los planes sociales, bueno miremos un poco a nuestro faro, nuestro punto de referencia, los admirables Estados Unidos de Norteamérica. Mil millones de dólares destinados a paliar las consecuencias sufridas por el desastre natural más grande de su historia, el huracán Katrina; fueron distribuidos entre supuestos damnificados que no eran tales, y luego de una investigación judicial realizada por la GAO (oficina de contabilidad del gobierno), se determinó que todos esos fondos fueron destinados a: vacaciones en el Caribe, cambios de sexo, fiestas orgiásticas en clubes de strippers, videotecas enteras de material pornográfico, entradas carísimas a las finales de la serie mundial de fútbol americano. El chiste llega hasta una prisión estatal, en donde presos recibieron cuatro millones de dólares al ser aceptados como víctimas del desastre, el problema es que en el momento del suceso estaban en la cárcel y… ¡en otro estado! Mientras tanto, miles de personas que realmente perdieron su hogar siguen viviendo en asilos comunitarios. Eso sí que es planificación estatal. ¡Perdón! eso es comunismo, me equivoque de dictadura.
Estuvimos esperando un poco de sinceridad eclesiástica, bueno, no es que la Iglesia vaya a aceptar culpas sobre su responsabilidad civil durante la última dictadura, o sobre la ineficiencia funcional de sus planes de caridad, ni de sus negocios multimillonarios con los peores fascistas de la historia de la humanidad. No, de eso no se habla, pero al menos uno de sus soldados abandonó el frente, se cansó de la hipocresía y se confesó ante todos nosotros. El cura dijo, en plena misa, que abandona su misión sacerdotal porque está enamorado, y no de Dios, de una mujer. Délfor “Pocho” Brizuela, quien diera uno de los discursos más críticos a la situación social en las propias narices del presidente, pero no por la derecha conservadora anti-anticonceptivos, sino reivindicando a Mujica, y otros curas muertos en aquellos grises años, y esperando una necesaria autocrítica gubernamental, religiosa, y empresarial. Felicidades ex sacerdote, nos seguimos acercando de a poquito al bienestar en la cultura.
La lista de acontecimientos sigue, pasaron cosas en este mes, algunas muy duras, otras tragicómicas. El presidente argentino sigue desligándose de la inminente campaña electoral, mientras su mujer se postula indirectamente para el mayor cargo de la política argentina (las cosas importantes se resuelven en la cama), Lavagna también quiere ser, estaba por comprar un kilo de carisma pero los precios altos lo desmotivaron, Macri no habla, ahora es presidente de un club de fútbol, ¡es el mes del Mundial! En Neuquén este mes no se realizaron obras de infraestructura monumentales, Sobich tiene anginas. ¿Y el patilludo?...él también quiere estar, declaró que “hace rato que está lanzado”, retóricamente es perfecto el sinónimo de vomitado.
La cultura nos pone inconscientemente en un lugar raro, incomodo. Pasamos la vida buscando la felicidad, que no llega, que se demora. Aparece en instantes, momentos leves a la hora de la conciencia. Las pulsiones reprimidas, el deber ser coartando el querer ser. La imaginación disuelta, en La Realidad, los puntos oscuros del deseo callados por “el silencio hospital”. Somos eso, un café demasiado fuerte para ser digerido, ese que nos da arcadas, que no nos deja pensar, porque, a fin de cuentas es más urgente vomitar que reflexionar.

1 comentario:

  1. no leí todo porque me tengo que ir, pero el de la foto se parece a mi!!

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