Poéticamente incorrectos.

Seguro es un intento en vano, pero no me voy a quedar quieto esperando el milagro.
Igual vas a ver que no es un milagro... acá ese mensaje no tiene alcance.
La cosa es que Tinelli no le haga la propaganda meses antes...
Estoy totalmente de acuerdo, por eso la única solución es ser Tinelli
Si llegaras a tener ese alcance de Tinelli, abría que ver como responderías, pero si fueras consciente de lo que hace él, no lo harías.
Pero bueno, mientras se siga mintiendo y diciendo que su programa no tiene influencia en la gente, estamos sonados…

Vos sos lo que olés, que estás oliendo ahora?
Tierra mojada

Una mujer embarazada huele tierra mojada, o un preso torturado y estaqueado.
Pero bueno, yo no tengo cura amigo psicólogo, para que te vas a gastar invirtiendo en el diván de cuero?

Recordá esto querido hermano: las personas dañadas son peligrosas, saben que sobrevivirán, saben que la muerte no es una palabra y ya se salvaron una vez.

Desde que uso lentes siento que un dios le puso “negrita” al Word de las cursivas que me atropellan.
Igual me parece que, la indiferencia es la forma más refinada de crueldad, y los años nos atan cada vez con más fuerza al sillón, desangrando las muñecas del playmovil inmóvil.

Cada uno, y en grupos, deberíamos establecer y reconocer nuestra voz interior,
para poder encauzar ese impulso que quiere salir, que quiere crear o destruir totalmente las ruinas, de otra manera será imposible escapar a la infelicidad constante, al desgano y al pesimismo.
Ya sea pintando un cuadro o pintando las paredes de un comedor infantil, en esa elección operarán nuestras pulsiones, los estímulos y la veracidad de nuestras intenciones de cambiar, de renovar el aire viciado.

Vos sos lo que olés, a qué huele tu ropa, tu habitación? Qué flota en el agua de tu inodoro?
Todo genio que pueda describir LA maldad en los actos de alguien, seguro ya se la mandó fea con algún otro genio cercano.

Soñé que te encontrabas con G. y el hijo lloraba sangre.
Decía, soy Joaquín, vengo en octubre y en febrero también, te gusta como canto?

Lo raro, o tal vez más interesante, es que yo Vestidos no estaba presente.
Observaba de afuera, maldito voyeur, o bendito si empezamos a soltar amarras y dejamos que las palabras sean sin nuestra estupidez de la moral y todas esas mentiras.
Eso es otra cuestión.
Sí, ya sé.
Eras el nexo entre ella y yo, o tal vez la razón del desencuentro y la desamistad.
O Joaquín mismo.
Puede ser. A mí se me zafa el precinto de seguridad y ahí lastimo a otros, echándome tierra a mí mismo.
No te alejes ya del umbral. Dale psicoanalizame.
Te contradecís en ciertas cuestiones, te puedo dar ejemplos pero sé que no es necesario, no te psicoanalizo, vos me abriste la cabeza en algunas cuestiones capaz yo te de una mano en esto y en el tema de tus celos...por vos no por mi...
Te escucho. Creo que hoy puedo volver a las fuentes y ver las palabras.
Y sí. Es hora de cambiar algunas cosas.
Por eso quiero escucharte hoy.
Te decía, es como que no podés confiar en vos, o que el otro confíe en vos, mirándote dormir.
A la enfermedad podés contagiarla con silencio.
Pero vos querida, no te manchás cuando decís lo que decís.
Control, posesión, gritos. Para mí era igual que amar.
Hay mucho amor entre los dos, pero es irreversible el vínculo enfermo.
Por eso no cerramos nunca la ventana aunque los vidrios sean de metal.
Nadie sabe. Nadie salva.
Me parece que uno mismo salva y uno mismo perece.

Sobre eso quiero escribir hoy.

Vos qué estás oliendo ahora?

La Fiesta de Todos.

Goles son orgasmos. Multi-nacionalismos.

La fiesta mediática en la sociedad de consumo es sinónimo de bienestar, cuando esta fiesta es en apariencias masiva, se puede explotar la idea de un presente eterno de felicidad. Si este presente dura un mes, un día, 90 minutos, no importa. Si esta fiesta es sólo simbólica y fetichiza un negocio multimillonario, no importa. Si se explotan y exacerban los peores vicios xenofóbicos y las más profundas ansias ególatras, no importa. La pelota no se mancha. Estamos todos reunidos frente a la TV que irradia rayos paralizantes. Cuantas más pulgadas tenga el aparato, más chico es el espejo. Así es la historia de la mayoría, el Mundial de fútbol, representa además del arcano del entretenimiento, la esperanza de reír y llorar más allá del horizonte de lo deportivo. Se mezclan otras cuestiones; sumisión política, complejos sexuales, fracasos laborales, odios reprimidos y se vuelcan (rebalsan), sobre el verde césped. Esto sucede porque nada iguala más que el fútbol, sólo la muerte pero esa es otra historia, porque una vez muertos no podemos disfrutar de la igualdad. En cada minuto suplementario se evoca la posibilidad del gol de oro, de ver consolidados los sueños que la realidad frustra, nos sumergimos en esa novela fantástica, en esa película de final incierto, en donde EEUU es menos potencia que Argentina, en donde somos superiores a todos, o al menos eso creemos. Entonces Messi se convierte en el Mesías del Siglo XXI. Y en cualquier rincón del mundo un niño sueña con un planeta plano, rectangular bien limitado por líneas de cal en donde cuatro elefantes y una tortuga se convierten en 22 seres inmortales que juegan (luchan dirán algunos), por la Gloria y la Eternidad. La urgencia de mitos en una sociedad hipersecularizada, el ser humano lúdico, el peso de la publicidad oculta detrás de la propaganda deportiva, son algunos de los condimentos de semejante banquete que nos hace agua la boca. En una situación de estas características surge la más cruda de las paradojas del nacionalismo, se reparten banderas con los colores patrios, se llama a tener una causa común apoyando a la selección nacional que nos representará en la competencia, el pueblo se une en plazas llenas vivando al equipo, en todos los medios la agenda política se convierte en el fixture del torneo. Se agudizan las diferencias nacionales, y desaparecen los obstáculos con el vecino de la cuadra o del edificio, es un hermano, es un abrazo emocionado, aunque antes le cerráramos la puerta del ascensor en la cara. La paradoja surge cuando nos damos cuenta de que quienes más exacerban los nacionalismos particulares son empresas multi-nacionales, las mismas en distintos territorios hacen uso y abuso de símbolos patrióticos muy diferentes. Es el internacionalismo pero no ya obrero, sino comercial. Pero hay cosas que no cambian, en el ’34 Mussolini creía conquistar al mundo con su invencible azzura; en el ’78 Videla le mostraba al mundo lo derecha y humana que era la albiceleste, en el ’90 Alemania consolidaba su segunda unificación en donde una mano oriental y otra occidental levantaban la copa y derrumbaban el muro. En el ’94 América convertía al fútbol en soccer, y al deporte y merchandising. Hasta llegar al ’06 en donde el nacionalismo adquiere las peores formas: cabezas rapadas atacan a musulmanes, judíos, latinos, africanos, asiáticos en todo el territorio teutón, mientras el gobierno alemán hace gala de su fama de país tolerante y antirracistas, mientras llegan prostitutas de todo el mundo para saciar las ansias de los hombres supraexitados después de cada partido-batalla. Eso sí que es nacionalismo globalizado. Pero olvidemos esto, se viene el Mundial, empieza la fiesta de todos, gritemos los goles, gocémoslos, que son como orgasmos, y entonces desde chicos de 5 años hasta ancianos de 80, desde explotadores hasta oprimidos, mujeres y hombres, todos gritamos los goles y tenemos el mejor de los orgasmos, ese que no necesita del cuerpo, sólo de una tele encendida. En este mes la sociedad no tiene clases, el dueño de la fábrica, el obrero de la fábrica y el indigente que pide comida en la puerta de la fábrica, se abrazan en un solo grito, un solo orgasmo, el orgasmo mediático. Las empresas no son sponsors, son hinchas oficiales, no se venden productos, se sigue a la selección de la mejor manera posible. Tenemos 30 hermosos días para disfrutar de nuestra efímera unión, estamos en competencia con los otros, silbemos los himnos ajenos y lloremos el propio. La enfermedad del exitismo y el fracaso nos ha contagiado, el fútbol es solo la excusa perfecta para encontrar nuestros héroes y los culpables, ganamos, perdieron.

“Si todo el año fuese de fiesta, divertirse sería más aburrido que trabajar” W. Shakespeare

90-60-90. El modelo económico argentino

Esta noche le vamos a dedicar un espacio a una nota de tinte económico que encierra una cuestión fundamental, los números, la bolsa, los impuestos, y las leyes económicas no son otra cosa que los intereses ocultos, vistiendo, disfrazando a un maniquí de rasgos sencillos que dice llamarse racionalidad, oferta y demanda.
(nota publicada en El Mestizo, hace tres años, pero que releyéndola creo que tiene más vigencia hoy que en esos días). Esa presión de intereses opuestos de la que hablaba en el 06' hoy se ha puesto tan de manifiesto, que ni falta hace mencionarla...
Desfile sobre una pasarela de arenas movedizas. Un modelo económico se establece principalmente por un conjunto de ideas, costumbres y comportamientos de las empresas y de la población con respecto al funcionamiento económico y político y por un conjunto de reglas formales establecidas por las decisiones políticas del Estado amparadas por la Constitución, las leyes y las instituciones vigentes. Ahora bien, establecer cuál es el peso específico real en un momento determinado de estos dos grandes niveles es sumamente complejo. Las organizaciones económicas, políticas y sociales operan como agentes diferentes que pugnan por hacer avanzar intereses opuestos. En el caso particular de la Argentina pos 2001, se observan aspectos positivos y negativos en una coyuntura económica favorable para el establecimiento de bases sólidas a largo plazo. Por un lado, el PBI crece desde hace tres años al 9 %, el desempleo descendió hasta el 10 %, la pobreza y la indigencia disminuyen, el consumo crece, las empresas tienen ganancias millonarias, y el peso de las exportaciones mantiene el superávit tanto externo como primario aliviando la presión que la financiación de capitales externos puede generar sobre la economía interna. El problema reside en las decisiones políticas de redistribución del ingreso, la especulación de las cúpulas comerciales que presionan sobre una inflación en constante incremento. En este punto es necesaria una aclaración: la principal causa de la inflación no es la suba de salarios como declaran la mayor parte de los medios y de los “economistas especializados”. El foco inflacionario tiene como principal agente a las exportaciones, cuando las exportaciones crecen más que la inversión se desabastece el mercado interno. Esto genera menor oferta y un aumento de precios en el mercado interno. Rubén Lo Vuolo, economista de Ciepp, declaró que: “Es ortodoxo tener un superávit fiscal brutal y que ese superávit se haga con un sistema tributario regresivo y ajustando gastos sociales. Es ortodoxo recomponer la acumulación a costa de los ingresos de los trabajadores.” En síntesis, lo que para algunos es una base fiscal mejorada de recaudación, para otros implica un ataque directo sobre el consumo de los sectores asalariados. Por otro lado, la negociación salarial, así como la política de precios, se maneja de manera corporativa, el gobierno prefiere discutir con los sectores concentrados (las cúpulas sindicales y los monopolios comerciales), lo que genera a largo plazo un juego de presiones y de equilibrios inestables que se construyen sobre la coyuntura económica y la fragilidad política y quedan de lado las decisiones estructurales. La pregunta es, ¿el inmenso y sostenido superávit fiscal se sigue acumulando con la prolijidad que exigen las recetas neoliberales o se destina a sanear los enormes vacíos institucionales en salud, educación y trabajo de las clases relegadas? El modelo resbala, cae y toda su belleza superficial se convierte en absurdo.

Le inexorable levedad del ser.

Cuerpo eres...

cuerpo tienes...

cuerpo ves...
cuerpo te ven...

Real e ideal,


y unificado,


y fragmentado,

y sentido,

y sufrido,


y gozado,

y anhelado,

y deseado,


Limitado, incompleto...
y temporal.

Artista: Arianne S. Calvet.

El Golpe Bajo

Del terror imprescriptible a la industria mediática de los desaparecidos.

La semana de conmemoración mediática por el cumplimiento de 30 años desde la última interrupción democrática en la historia argentina, osciló entre el completo oportunismo político y económico, muy poca o ninguna autocrítica, altísimos niveles de hipocresía ideológica, y algunos mínimos espacios en los que se hizo un análisis al menos parcialmente sustancial, con el planteo, aunque escaso, de las acciones, apoyos, indiferencias y traiciones de los distintos sectores de la sociedad.
La visión unidireccional de los medios masivos de difusión es evidente: el golpe fue obra y producto de sólo dos situaciones; por un lado, el inoperante gobierno de Isabel Perón y su oscurantista ministro López Rega, y por el otro, la locura de tres asesinos autogobernantes que querían eliminar de la faz de la tierra a quienes pensaran distinto. Nada se dijo del plan sistemático Cóndor delineado por los EEUU para implementarse en los países del Cono Sur, con un claro trasfondo económico neoliberal. Nada se dijo del papel especulativo y predominante en la economía domestica del capital financiero, de la nacionalización todavía impune de la deuda externa privada. No se habló tampoco de la instauración de un individualismo atroz como modelo social de auto y alter exclusión. Ni de la institucionalización de la lógica del miedo y el no te metas que reina aun hoy en innumerables espacios de conflictividad social.
Parece que en esos 7 años no vivió en la Argentina nadie más, ni los “capitanes de la industria” multiplicando sus ganancias (“plata dulce” de por medio), ni la Iglesia entregando a sus fieles (confesionario de por medio), ni la mayoría indiferente (campeonato mundial de por medio), ni los periodistas sumisos y sumidos en el ocultamiento de lo que estaba sucediendo. Rodolfo Walsh envío su, hoy celebre Carta Abierta, a todos los medios y recibió un silencio atroz de todos y cada uno de los medios importantes. Perdió la vida en uno de los actos de despojo y humanismo más grandes de nuestra violada historia nacional.
Oportunismo político es: un documental vaciado de contenido por cada canal abierto enarbolando la bandera de lo que podría llamarse, la industria mediática de los desaparecidos -el desaparecido vaciado de todo sentido real, y llevado a la masividad mediática como una palabra, como un ente que en nada se relaciona con la tortura, los vejámenes, las violaciones, etc.; recibidas y sufridas por seres reales asesinados por otros seres humanos, derechos y humanos-. Hipocresía ideológica es: que Hadad haga un documental sobre el golpe cuando hace no más de dos años estaba prohibido mencionar la palabra dictadura en Radio 10, era el Proceso de Reorganización Nacional. Ninguna autocrítica es: que el hoy columnista estrella de Clarín Eduardo Van Der Kooy se haya reunido con Videla en pleno gobierno de facto y además de elogiar profundamente la política de gobierno, instó a “acrecentar la importancia de los medios en la preservación de las libertades de un pueblo”, sin palabras.
El acto de conmemoración fue masivo y tuvo por un lado, la participación de amplios sectores sociales y por el otro, los conflictos organizacionales de siempre, las banderas facciosas por encima de la reivindicación general, un discurso fuente de conflicto (por sus críticas al gobierno), con el que Madres y Abuelas no estuvieron de acuerdo, disputas por el protagonismo y los laureles políticos. Todas diferencias que le quitan fuerza a la impresionante presencia popular en la Plaza de Mayo, que sirven como caldo de cultivo para los titulares del día siguiente, que les dan letra a los oportunistas detractores de todo movimiento que atente contra la quietud institucional, moral y mental. Los rectores del status quo.
El saldo positivo después de tres décadas de avance democrático es que la verdad poco a poco está saliendo a flote, mal les pese a muchos, la grieta está abierta y día a día se hace más público el terror de aquellos años, se filtran los sucesos reales. Los 24 de marzo venideros, además de generar fines de semana largos y días libres para ir de shopping, serán una señal de atención, un despertador para los que aun sigan durmiendo en el sueño eterno de la pasividad social. Lo importante será empezar a reconocer responsables que siguen tranquilos en el anonimato, profundizar en el encuentro, no ya en la búsqueda, de justicia, derribar los muros de la intolerancia, abrir las puertas de todos y cada uno de los centros clandestinos de tortura, descubrir la identidad de los más de 400 hijos apropiados que siguen sin conocer su pasado, refrescar la memoria de los olvidadizos de siempre. En pocas palabras y utilizando materialmente un término teológico, la búsqueda de redención. “Sólo la humanidad redenta toca plenamente su pasado”. W. Benjamin.