martes, 28 de julio de 2009

El recuerdo Impune.


Aquel que no tiene sentido del humor, es porque tiene mucho miedo a que…

Me siento mal, hoy tuve un recuerdo del futuro, los dueños del alambrado, seguirán presionando y va a conseguir que no solo no les cobren a ellos retenciones, paréntesis: las retenciones a los productores pequeños, chicos, que viene con los justo y “necesario”, léase veinte hectáreas o menos, esas retenciones van a seguir estando vigentes, como antes de Kirchner, como antes de todas las mareas mediáticas que convencieron a mi abuela sobre la honradez y la bondad de De Angelis y sus amiguito Biolcati, esas se cobran con presiones y facón en mano en la puerta de la tranquera. Decía, que no sólo no les cobren las retenciones, sino que además les paguen “un bono extra” por su patriotismo y su compromiso con la Argentina.
En ese recuerdo, descubríamos un montón de secretos de Estado de la “década K”, cuantos negociados corruptos, cuánta plata se habían robado, un montón de casos de censura, y periodistas que perdieron sus trabajos, y estatizaciones de aerolíneas con sobreprecios y cometas, todo contado por un gracioso y carismático conductor de trasnoche, devenido en conductor de programa de entretenimiento y humor político y actualidad a la hora del prime time en Canal 13 (en la instantánea del mañana seguía siendo de Clarín, como también así Telefé, América y los ExCasinos de la provincia de Bs As) .
En ese video de mi vejez, la ley de medios nunca se aprobó, es más, mediante decretos presidenciales se legalizaban privatizaciones de los últimos medios públicos, las escuelas secundarias del estado desaparecían, los hospitales se cerraban y eran reemplazados por una ingeniería privada más cruel que las AFJP, las villas miseria se cercaban totalmente y eran “gobernadas” por seudointendentes nombrados por la policía, la gendarmería y los gobiernos de derecha reinantes en todos los territorios nacionales. Se cerraban centros populares barriales de resistencia, se expropiaban terrenos comunitarios con salvajes allanamientos, (como en el pasado reciente en el corazón de Caballito), todo avalado por una opinión pública manipulada, y proyectada hacia esos estímulos fascistas que sabemos están MUY presente en nuestro querido país.
Muy mal me siento, porque en esta foto de mi futuro vi a Macri 2015 reelección. También vi la policía eficiente y bonaerense de de Narváez y las obras públicas de Michetti Pro-propias.
Y me siento peor, porque me veo desde ahí, y en dos años que tenía desde el ´09 al ´11, no hice nada, ni una sola cosa, NADA, para evitarlo, como mis viejos con Menem, ni mis abuelos con Videla. Nada.
Sudaba en mi recuerdo, sentado en un sillón cómodo, de eco-cuero negro con apoya pies haciendo juego, con una gota de plasma inteligente de 60 pulgadas, dos hijos regordetes y amantes de los cuentos de María Elena Mitre Grondona Tinelli, y los video juegos (fuegos) interactivos patrióticos anti crisis crítica.
Sudaba porque tenía recuerdo sobre aquel, momento en que había visto un recuerdo del futuro, y no había hecho nada. Nada.
Después de esa visión apocalíptica, me he resuelto que no puedo ser tan cagón, tan miserable, tan egoísta, tan indiferente, algo tengo que hacer para detener este tren de campañas mediáticas y exacerbación de la xenofobia y el individualismo aun más atroz que su predecesor menemista, ese tren que tiene como próxima estación esclavizar aun más nuestra tierra en manos extranjeras y con la complicidad de los vendedores de almas de siempre, sumados a la estupidez y ausencia de memoria que tan bien nos caracteriza como ciudadanos nativos de la Reputa Argentina.
Yo voy a hacer algo, no podría soportar a mi conciencia en diez años, si hoy no la dejo volar libre, llena de compromiso y participación.
Ustedes que van a hacer?

Aquel que no tiene sentido del humor, es porque no puede reconocer a la voz de su conciencia que le cuenta día y noche sus peores y más secretos defectos.

El Sr Barriga y el intestino grueso.


Hoy voy a hablar del chamuyo por msn, tengo ganas de sacarle una foto al diálogo que tuve con la psicóloga de mi tía Mabel. No, NO, pensandolo mal, mejor quisiera no hablar, sino que me hablen. Me encantan los comentarios que algunos genios dejan, cuando compartimos ideas, sensaciones, ganas de cagar a palos a Macri, pero HOY quisiera otra cosa, no sé, tal vez que me cuenten ustedes que piensan del anonimato, de las pascuas, de las violaciones de baldío, de la falta motorizada, de los deseos que nos mueven a coger por amor, o coger por coger, o coger por no hacer mate. Que piensan? un sabio del lejano oriente decía en sus prédicas que la única manera de sufrir menos en la vida, es entender cual es la raíz, de la huella que deja marcas en nuestra personalidad. En que momentos, situaciones se sintieron plenos? llenos de esa alegría circunstancial que les dibuja una sonrisa indeleble. Con ganas de brindar con cualquier gil que se cruce con camisa a cuadritos y una mirada de "dame amor, tocame, tocame más". Esos segundos pagan el boleto. Cuánto de nuestra cotideaneidad, de nuestra rutina se acerca aunque sea un poco a esos segundos? Digo, se sienten bien adentro de su cuerpo?Con sus imperfecciones, sus lunares con pelos, sus rollos velados en la exposición de la belleza posmoderna. Eso no importa, y todo aquel que aprendió a leer el espejo lo sabe. Porque a la larga tener la pija más larga le hace doler la concha a tu amorcito...Escriban, digan, jueguense a todo o nada, total si hay un juez en este mundo virtual es Daniel Alerta y no produce nada mucho mejor a las boludeces que los locos y criminales podemos escribir. Vecinos de ruleros, llamen a la policía porque mis amigos y yo los vamos a coger a todos. Insisto, tomense 5 min de su acelerado tiempo y escriban algo, compartanlo con esta comunidad improvisada que estamos fundando, que van a perder? la dignidad? el respeto? la virginidad? seguro que no...De última siempre hay tiempo para arrepentirse, esa es la posibilidad que narrar nos da, que no tenemos en la vida, porque nos gusta la novia o el padre de alguna amistad, o le robamos plata a papi para comprar drogas, o simplemente estudiamos 7 años una carrera que luego nos aburre 50. Pero bajito querido, que me voy a dormir...Qué lindo es tomar grapamiel uruguaya!Cerrando el cierre del pantalón, ESCRIBAN MIERDA! que no les va a doler más que algunas de las porquerías que ya han vivido. O me tengo que disfrazar de Sr Barriga y pasar casa por casa a cobrar la renta y recibir algún que otro cachetazo de deseo reprimido?Hoy no menciono a nadie, porque todos tienen mil mierdas para contarnos.

sábado, 25 de julio de 2009

El Bienestar en la Cultura. Un café fuerte que vomité, pero sin filtro.

Ser o querer ser.



(nota publicada en la revista El Mestizo, julio de 2006)

Mientras se juega el Mundial, el mundo sigue girando, no parece, pero la vida continúa. En las siguientes líneas haremos un repaso de lo otro que aconteció en este silencioso mes. Esperamos que el lector no se sienta tocado, cualquier cosa levante la mano para hablar, es el mejor signo para establecer una asamblea. Ah, tiene razón, es una lástima que los medios transformen comunicación en difusión, y que la única mano que se levanta en este mes es la mano de Dios, ¿se sintió tocado?, no podemos jugar a la mancha, mejor siga mirando el Mundial…
Los medios registraron seis violaciones en menos de 15 días, puede que sea uno de esos cínicos golpes mediáticos (recordar la época en que secuestraban un empresario por día), pero en comparación con el mes pasado parece que los deseos sexuales reprimidos que el fútbol sublima en forma de orgasmos-goles, se canalizaron en violencia contra la integridad sexual. Dos de estas violaciones acontecieron minutos después de la finalización del partido que Argentina le ganó a Serbia y Montenegro por 6 a 0. Seis goles, seis violaciones, la tragedia de la numerología.
Antes viajábamos a la estratosfera y llegábamos a cualquier punto del planeta en 45 minutos, ahora Kirchner, un poco más austero que su predecesor innombrable, declaró que en menos de dos años va a estar listo el tren bala que tardará dos horas y media en un recorrido entre Capital y Mar del Plata. Un chapuzón en la Bristol y de vuelta al micro centro a broncearnos color cemento. ¡Cortinas de humo, dos por diez pesos!
Decía Levi-Strauss que la prohibición del incesto es la ley universal que determina el paso de la naturaleza a la cultura, el único nexo inevitable con el que el hombre se hace un animal cultural. Parece que estos hermanos no leyeron nunca al francés, y mientras Saviola se encontraba con Maxi Rodríguez para hacer el primer gol frente a Serbia, estos dos chicos se reencontraban, y huían de la casa de sus padres. Son hermanos biológicos, ella tiene 13 años y él 16, la madre al encontrarlos (en contadas veces) a los besos, amenazó con separarlos, al día siguiente ya no estaban, desaparecieron y hasta el momento se desconoce su paradero. Si leen esto, felicidades, como toda excepción a la regla los necesitamos para reconocernos como seres falibles, con cada norma moral represiva que se rompe, nos acercamos un poco más al bienestar en la cultura.
En la Argentina hay quienes se quejan de la mala distribución de los planes sociales, bueno miremos un poco a nuestro faro, nuestro punto de referencia, los admirables Estados Unidos de Norteamérica. Mil millones de dólares destinados a paliar las consecuencias sufridas por el desastre natural más grande de su historia, el huracán Katrina; fueron distribuidos entre supuestos damnificados que no eran tales, y luego de una investigación judicial realizada por la GAO (oficina de contabilidad del gobierno), se determinó que todos esos fondos fueron destinados a: vacaciones en el Caribe, cambios de sexo, fiestas orgiásticas en clubes de strippers, videotecas enteras de material pornográfico, entradas carísimas a las finales de la serie mundial de fútbol americano. El chiste llega hasta una prisión estatal, en donde presos recibieron cuatro millones de dólares al ser aceptados como víctimas del desastre, el problema es que en el momento del suceso estaban en la cárcel y… ¡en otro estado! Mientras tanto, miles de personas que realmente perdieron su hogar siguen viviendo en asilos comunitarios. Eso sí que es planificación estatal. ¡Perdón! eso es comunismo, me equivoque de dictadura.
Estuvimos esperando un poco de sinceridad eclesiástica, bueno, no es que la Iglesia vaya a aceptar culpas sobre su responsabilidad civil durante la última dictadura, o sobre la ineficiencia funcional de sus planes de caridad, ni de sus negocios multimillonarios con los peores fascistas de la historia de la humanidad. No, de eso no se habla, pero al menos uno de sus soldados abandonó el frente, se cansó de la hipocresía y se confesó ante todos nosotros. El cura dijo, en plena misa, que abandona su misión sacerdotal porque está enamorado, y no de Dios, de una mujer. Délfor “Pocho” Brizuela, quien diera uno de los discursos más críticos a la situación social en las propias narices del presidente, pero no por la derecha conservadora anti-anticonceptivos, sino reivindicando a Mujica, y otros curas muertos en aquellos grises años, y esperando una necesaria autocrítica gubernamental, religiosa, y empresarial. Felicidades ex sacerdote, nos seguimos acercando de a poquito al bienestar en la cultura.
La lista de acontecimientos sigue, pasaron cosas en este mes, algunas muy duras, otras tragicómicas. El presidente argentino sigue desligándose de la inminente campaña electoral, mientras su mujer se postula indirectamente para el mayor cargo de la política argentina (las cosas importantes se resuelven en la cama), Lavagna también quiere ser, estaba por comprar un kilo de carisma pero los precios altos lo desmotivaron, Macri no habla, ahora es presidente de un club de fútbol, ¡es el mes del Mundial! En Neuquén este mes no se realizaron obras de infraestructura monumentales, Sobich tiene anginas. ¿Y el patilludo?...él también quiere estar, declaró que “hace rato que está lanzado”, retóricamente es perfecto el sinónimo de vomitado.
La cultura nos pone inconscientemente en un lugar raro, incomodo. Pasamos la vida buscando la felicidad, que no llega, que se demora. Aparece en instantes, momentos leves a la hora de la conciencia. Las pulsiones reprimidas, el deber ser coartando el querer ser. La imaginación disuelta, en La Realidad, los puntos oscuros del deseo callados por “el silencio hospital”. Somos eso, un café demasiado fuerte para ser digerido, ese que nos da arcadas, que no nos deja pensar, porque, a fin de cuentas es más urgente vomitar que reflexionar.

Ficción y Realidad. El espejo deforme.

Acercamiento confuso a la literatura periodística.¿Se puede ser escritor de ficciones y de notas políticas al mismo tiempo, en el mismo lugar, en el mismo párrafo? Sí, claro, respondí sin meditar demasiado mi respuesta. ¿Por qué, cómo? indagué. Eso no lo sé. Ah! las cosas se ponen en su lugar…
Carlos Gamerro, escritor de Las Islas, la novela argentina de fines de siglo XX más profunda y desafiante, que haya leído, dice con respecto a esta (probablemente falsa) dicotomía que él escribe para averiguar lo que siente o piensa, más que para decir lo que piensa o siente. Y agrega, “lo político de la literatura ha cambiado de signo, y ya no tiene mucho que ver con la idea del compromiso”[1]. Yo me pregunto si esta finalidad, averiguar lo que se siente o se piensa con respecto a determinados temas que generan dudas, ambivalencias y que son evidentemente de tinte político, no se aleja de lo que una nota política debe o intenta producir. Quiero decir, está absolutamente claro que la literatura es la búsqueda de respuesta, de lugares misteriosos y ocultos que son imperceptibles a primera vista, pero lo que no me resulta claro o convincente es el papel político o social que pueda tener una ficción. Indirectamente y a largo plazo la lectura trasforma, decodifica, los mensajes implícitos de las ficciones, los vuelve políticos a través de cambio de mentalidades en los lectores, pero directamente, parece ser imposible (repito, parece ser) que un cuento influya tan efectivamente como un editorial, y peor aun, sería improbable leer en la primera página de un periódico o una revista de opinión, una ficción que funcione como pensamiento editorial del medio. ¿A qué se debe esto? a que el paradigma periodístico actual no se permite este tipo de situaciones; a que realmente no funciona un cuento o un poema como plasma de actualidad, a que no estamos preparados como lectores (por la repetición, la educación recibida), para captar el mensaje ficcional con toda su fuerza política.
Es evidente que la figura del intelectual, escritor literario a perdido fuerza en el debate público, ese doble juego de prestigio y aislamiento dimensiona el espacio real que la literatura tiene en la esfera periodística de actualidad. Posiblemente, los tiempos necesarios para reconocer discursos literarios y periodísticos sean distintos, pero aun así, creo que tiene más que ver con errores conceptuales, la idea de que no se puede decir lo mismo y con similar efecto de ambas maneras. O quizás, tenga razón Oliverio Coelho cuando dice que es buscar un exceso de trascendencia la ingerencia que una disciplina menor como la literatura puede tener en una sociedad eclipsada por el mundo del espectáculo.[2] Pero, y tal vez peque de ingenuo, lo que hace menor a la literatura, es la calidad de su producción, la forma en que se adapta o revoluciona la rigidez de las estructuras (esto es periodismo, esto “otro” literatura), en este sentido Roberto Arlt, Rodolfo Walsh, Raúl Scalabrini Ortiz, ¿qué hicieron?, ¿periodismo o ficción?, ¿se preguntaron si estaban rompiendo reglas estilísticas o de género? Por otro lado, no niego el complejo proceso neoliberal que desde el ’76 en adelante desgarró el poder social de la literatura, dice Gamerro “la censura ha dado lugar a la indiferencia que es mucho más efectiva”[3], y es cierto, un Clarín del domingo tiene más tirada que toda una publicación entera de la mayoría de las novelas de escritores argentinos actuales. El ciudadano medio ignora la literatura política, no le llega casi nunca a sus manos como un diario, ni entra en su casa con la rapidez de la televisión, pero eso no alcanza para justificar la distancia entre ficción y política. Y cuando hablo de literatura política, no me refiero a la absurda dicotomía entre arte social y arte estético, me refiero a que la participación social del escritor no se limite a un artículo perdido en las páginas de algún diario, hablo de que no entiendo porque deben inevitablemente separarse la esfera de lo literario-ficcional de los temas políticos y sociales. Hay que pedirle peras al olmo, porque no sabemos que frutas podría llegar a dar hasta que no las comemos. El lector espera que lo sorprendan, que le muestren algo que no se la había ocurrido imaginar. El infierno no es la mirada de los otros, es la forma en que nosotros creemos que nos están mirando los otros. Yo estoy podrido de las formulas de escritura, las formulas de lectura, las formulas de crítica. Y me contradigo, y desdigo todo el tiempo, es el chiste de decir algo y como decirlo, equivocarse, para que el que viene después diga algo más interesante. Ficción y realidad se miran en el espejo y buscan las siete diferencias.
[1] Revista Oliverio, número 12, Pág. 23
[2] Ídem 1. Pág. 21
[3] Ídem 1.

viernes, 24 de julio de 2009

Letras muertas. Frases asesinas.


Hace 30 años exactos X era torturada por tres soldaditos de papel carbónico, que amparados por el circunstancial poder que les daba una directiva ambigua: hagan lo que quieran pero que hable, daban rienda suelta a sus instintos más monstruosos. Una noche cada dos, la violaban bajo la mirada atenta del sacerdote castrense que les daba “apoyo moral”, mientras tirado en el suelo sucio y húmedo, yacía Y, el novio de X. Que obligado a observar todo, se moría lentamente. X e Y esperaban un hijo, que debía nacer en seis meses, pero ese pequeño y frágil ser nunca conocería la luz solar, ni caminaría descalzo por la arena caliente del verano, ni diría ni una primera, ni una última palabra. Frases asesinas. Moriría en el vientre desfigurado por los golpes, las picanas y las vejaciones, de su madre. X en tiempos lejanos, cuando solo era una joven, estudiaba medicina, desde entonces habían pasado tres largos y abismales meses. A la fuerza creció, maduró, y terminaría por pudrirse prematuramente en el fondo del río justo frente a las costas de su hogar paterno en Vicente López. Frases asesinas. Y, hace 30 años tenía 20, y justo antes que lo “chuparan” se preparaba para rendir dos finales que debía de abogacía. Ambos estaban anotados en la agenda de Z, su compañero de secundaria que a esas alturas había conseguido escaparse a Montevideo, igual no iba a llegar muy lejos, lo reconocerían cuando estaba a punto de tomar un vuelo a Madrid, y ahí moriría con tres balazos en la espalda disparados por un primo segundo uruguayo de uno de los soldaditos de papel carbónico que creía haberse enamorado de X. Si se le puede llamar amor a la obsesión crónica que lo impulsaba a llevársela una noche cada tres, cuando le tocaba vigilar el segundo subsuelo, al cuarto vacío del fondo, donde pretendía que ella lo besara y correspondiera a su amor. X había perdido todo deseo de vivir, la pelea entre las pulsiones de vida y muerte ya tenía un ganador, y este soldadito imberbe, confundía indiferencia con afecto. Y, murió deshidratado en una celda oscura contigua al cuarto en el que X contenía su último llanto. Frases asesinas. Esa noche “se les fue la mano” y sin siquiera imaginarlo, dejaron que X descanse muy lejos de ese infierno. X, Y, Z son sólo letras muertas en la historia de un abecedario atroz que no se enseña en ninguna clase de lengua.
Los tres soldaditos de la obediencia debida andan por ahí, manejando taxis, gritando en cuarteles, baldeando veredas de edificios de la gente decente, con la impunidad que les da el anonimato y la libertad que les otorga el olvido.
Letras muertas en el abecedario, letras muertas en las noticias de los diarios, letras muertas en las leyes de la democracia formal capitalista, letras muertas en los libros de historias, letras que no están ni vivas ni muertas, están desaparecidas.

Personalizar.


Vestidos no tiene nombre porque odia a los vendedores que piensan que “personalizando” le van a poder vender el plasma al compulsivo. El plasma tiene mala definición, porque las imágenes que proyecta son equívocas y alejan al alienado de los verdaderos motivos de su vida. Vestidos se confiesa frente a los lectores porque no cree en los ministros de la iglesia, que justamente administran las miserias, los miedos y la impotencia del ser ignorante e ignorado. La iglesia tiene mala memoria, pero se acuerda bien de lo que debe prohibirse. Prohibidos de ciudad, deberían llamarse los vagabundos que mueren de frío frente al cristal espejado de la mueblería lujosa. El sillón es incómodo, porque tiene un relleno de carne podrida, con intestinos de los muertos de mi ambición. Igual me gusta relajarme tomando mi whisky, acariciando a mi perro de raza aria. Los hombres no tienen raza, no tienen conciencia, no tienen felicidad. Y lo peor es que no piden nada de eso, quieren un pedazo de plástico y cuotas sin interés. Desinteresados de ciudad, deberíamos ser todos nosotros, que no encontramos la sustancia en lo que hacemos, que estudiamos carreras diagramadas para hacernos lo más estúpidos y engreídos que se pueda. Que trabajamos para extranjeros que no saben ni como se llama nuestra ciudad, en un trabajo que nos demanda más tiempo que soñar, que encontrarnos con quienes queremos, o del que jamás tendremos para sentarnos a crear algo nuevo, que le de sentido y sensaciones a nuestros setenta años de indiferencia. Indiferentes, indiferenciados de ciudad, amebas amorfas que no descubren lo realmente importante hasta el segundo antes de morir. Pobres que se matan entre ellos cuando ya deberían haber salido a quemar countries y canales de televisión; tibia clase media que solo piensa en donde va a veranear en sus tristes 15 días de vacaciones anuales, ricos que mueren de depresión y soledad. Deprimidos de ciudad, que traen hijos insulsos al mundo y les enseñan a cuidar lo propio, idiotas que después van a trabajar y piensan que la silla barata en la que se van jorobando día a día es de ellos y no de la multinacional S.A. Vestidos odia al pelotudo que vota a empresarios porque los ve serios y eficientes. Eficientes, efectivos, eficaces, efímeros. Vestidos detesta al padre de familia “tipo” que ve con peores ojos a un pibe fumando hierba que a un pibe pegándole a la novia. Vestidos quisiera prender fuego todos los contratos de alquiler del mundo y en esa gran fogata calentar las conchas de todas las mujeres frígidas y aburridas dominadas por los prejuicios y el machismo. Vestidos no entiende cuál es su función en el mundo, tampoco entiende como sigue habiendo gente que prefiere sobrevivir sin quejarse a que le peguen una patada en el orto por rebelarse un poco a lo establecido. Vestidos odia a los abogados que crean palabras raras y cientos de miles de hojas-folios para complejizar y ocultar el simple hecho de que su profesión es mantener a la plebe controlada “dentro de los marcos legales”, o metida en una jaula cuando no tiene guita para pagarles a ellos mismo. Sórdidos comunicadores hablan de democracia y de dictadura comunista, “no bueno, pero acá somos libres de elegir”, dale Santo, andá y decile eso al pibe que todos los días come la basura de la comida basura de Mc Dólar, que mide menos que tu nieto y que tiene una parte del cerebro atrofiada, una parte que no vuelve más. Cínicos. Vestidos ha perdido la esperanza, porque tener fe es un acto reflejo que se basa en ser crédulo, y vestidos dejó de serlo cuando vio de cerca al diablo jefe de gobierno y futuro presidente de todos los argentinos derechos y humanos y con ojos claros llenos de brillo y éxito. Vestidos habla en tercera persona hoy, porque se le canta el quinto forro de las pelotas. Se siente Perón. Vestidos cree en vos. Vos en qué carajo creés?

jueves, 23 de julio de 2009

Capital.

No puedo hablarte, estoy mudo. No podés acercarte, estás paralizado. No puedo tocar, primero tengo que comprar. No puedo comprar, primero tengo que comer. No puedo comer, primero tengo que tener.

No puedo tener, porque vos lo tenés primero. No puedo explicarte que no tengo, porque no se hablar. No puedo hablar, porque primero tengo que saber. No puedo saber, porque primero tengo que aprender. No puedo aprender, porque primero tengo que comer. No puedo comer, porque primero tengo que tener. No puedo tener, porque vos no me lo prestás. No puedo prestar, porque no es mío. No es mío porque no hay nada de todos, o es tuyo o es mío. No es mío porque no aprendí nunca a reclamarlo. No puedo reclamar, porque no es mío. Y no es mío, porque no nací en tu cuerpo. No nací en tu cuerpo, porque nadie nace en el cuerpo ajeno. Lo ajeno no me pertenece, no quiero robar, porque voy preso.
No voy preso porque soy esto, sino, porque no soy vos. Si fuera vos no iría preso, sería el dueño de la cárcel. No soy la cárcel porque no es humana, como ninguna propiedad lo es. No soy, porque no es quien no tiene conciencia de lo que es. No soy, porque no tengo derechos sobre ninguna propiedad, ni siquiera mi cuerpo. No soy un cuerpo, porque soy una idea. No soy una idea, porque estoy hecho de materia. No soy materia porque no tengo con qué comprarla. No compro, porque un cuerpo no está en venta. “Todo está en venta”. Perdón, pero…entonces ¿qué soy?

Jabón Blanco.

Qué me importa si te bañás o no? si me estás esperando ahora en tu casa para que hagamos el amor por primera vez, por última o no hagamos nada y hablemos del Indio Solari. En un par de horas por ahí te digo que te amo, y a vos te suena raro, entonces decís que el amor es mala palabra. En un par de horas por ahí toco el timbre de tu casa, sale tu vieja y me manda a la mierda porque me parezco a tu novio anterior, ese que te puteaba adelante de ella, para hacerse el macho, porque sabía que tu vieja estaba sola, y cualquier destello de hombría la seduciría. Pobre estúpido. Qué importa si me decís ahora en un par de minutos cuando te llame por teléfono que al final tenés sueño, y entonces yo me tiro adentro del vaso de grappa y me vuelvo una sirena del riachuelo? En qué momento empezamos a ser tan paranoicos o dejamos de ser inocentes? Porque no me nieguen que la paranoia no es sólo una marca más de la culpa. Cuándo fue que nos olvidamos que lo único que necesitamos es calor, cucharita, alguien que nos escuche, nos admire y tenga ganas de vernos de nuevo, después de que le mostremos las cicatrices horribles de nuestra piel?Hacemos cuentas, el alquiler, los puchos cada vez más caros, la facu privada, el postgrado a precio dólar, que se nos gasta el perfume importado y tendremos que volver a la colonia Paco, o lo que es mucho peor, a fumarlo en plaza Almagro. La calculadora está por explotar, la banda ancha, las llamadas a celulares, el impuesto para pagar los viajes del hijo de Macri, y volvemos a olvidar lo que sabíamos de niños. O algún distraído sigue pensando que de niños no nos preocupábamos porque éramos pelotudos?Te decía, se hace tarde para irte a buscar, y vos esperando, esperando empezás a hacer conjeturas sobre mi demora, y la espera desespera dice un poeta de la cumbia villera. Señora, llame a la policía, mis amigos y yo los vamos a coger a todos. El problema va a ser cuando nos empecemos a coger entre nosotros, ahí ni la guardia urbana te va a salvar. Si alguno tuviera la receta para curar la infelicidad en todos nosotros, no piensan que ya la hubiera publicado en deremate.com? O será que la única respuesta es esa que veo todos los días en el portero, el dentista o mi madre? Dejar que la vida pase, y que siempre sea “mientras tanto”. Por eso, no te bañes, que antes de irte a buscar compro una bolsa de mierda en mc donalds y la llevo calentita para demostrarte mi amor. Cómo puede ser que haya tanto cínico suelto diciendo que lo malo está por irse, boludos maniqueístas que definen a las cosas por su valor energético. Chau, tengo demasiadas preguntas, y no me anda el signo de admiración en el teclado.